GEORGIE BURNS, una mujer de 42 años, y ALEX PRIEST, un hombre del 75, se conocen en la estación londinense de Saint Pancras. Al verlo por detrás, Georgie cree que Alex es su padre (hace un año que murió) y, en un arrebato «absurdo», lo besa en la nuca. Ese encuentro calenturiento será el comienzo de un juego maravilloso que les cambiará la vida a ambos.
Con HEISENBERG, SIMON STEPHENS quiere mostrarnos lo insegura y cómica que puede ser la conexión entre los seres humanos.